En esta ocasión quiero hablaros de un plato que cada vez me gusta mas. Las migas de Almería. En estas mini vacaciones navideñas que estoy pasando en Almería, ya han caído dos veces, en ambas ocasiones hechas por mi suegro en el chiringuito que tiene en Roquetas de Mar, del que por cierto quiero hablar en algún momento.
Las migas se suelen comer cuando hace mucho frío, mal tiempo o llueve, cosa que es bastante difícil en Almería, así que en cuanto sale un día un poco así, hay que animarse. No he visto cosa mas fácil, sencilla y mas buena. Las migas que se comen en Almería no son de pan, como las extremeñas, sino que se hacen con harina. He visto hacerlas y es bastante fácil y aunque me he llevado alguna vez la harina, no salen igual y es mejor venir a comerlas aquí.
Las migas tienen que quedar esponjosas y no secas y luego resulta clave el acompañamiento, unos buenos pimientos verdes fritos o de padrón, unas sardinas, unos boquerones fritos o pijotas fritas, una buena panceta, chistorra, morcilla, longaniza y me encanta con un buen tomate aliñado. Sí, está claro, no es un plato precisamente ligero, pero yo puedo repetir una cuantas veces sin cansarme.
Se recomienda tomarlas con vino y no con agua que siempre acaban hinchando mas.
Creo que estas vacaciones ya no me da tiempo a una tercera ronda de migas, pero en la próxima visita, volverán a caer. Recomiendo a todo el que venga a Almería que se anime a probarlas.
Dejo la receta que he encontrado por Internet y que encaja con la de mi suegro, excepto que en este caso el no mete el pimiento y la panceta en el aceite sino que lo hace por separado. Habrá que probar esta técnica.
Migas de Almería
Ingredientes: 3 vasos de los de agua de harina de trigo, 3 vasos de agua, 1 vasito de aceite de oliva, una cabeza de ajos, 4 pimientos verdes, 150 gramos de panceta de cerdo. Los acompañamientos ya comentados, boquerones, etc.
Se calienta el aceite de oliva en una sartén honda. Se fríen los ajos enteros, sin pelar. Se sacan y se fríen los pimientos cortados en tiras. Se sacan y se añade la panceta, cortada en tiritas. Se retira. Se deja el aceite en el fuego y se pone sal y una cucharada de harina espolvoreada por encima. Esta operación se hace para que el aceite no salte mucho al añadir, rápidamente para que la harina no se queme, los tres vasos de agua. Cuando el líquido llegue al punto de ebullición, se añaden los tres vasos de harina. Se mezcla bien la masa y, con el canto de la paleta, se van haciendo cortes en la harina para dar salida al agua. Se baja el fuego y, cuidando que la masa no se agarre, se sigue trabajando la masa con el canto de la paleta para que se vayan formando bolitas pequeñas y doradas. Una vez tome ese aspecto toda la masa, estarán listas las migas. Se sirven acompañadas de todos los acompañamientos que se hayan preparado, las rabanillos peladas, los pimientos, la panceta, el ajo, las aceitunas